Si se comenta un poema
de cada libro publicado durante estos veinte años, sin duda que la selección se
sustenta en intereses y gustos personales que
podrían perjudicar al poeta Víctor Valera Mora, corriendo el riesgo de
parcelar o encasillar injustamente su producción poética.
La muestra poética que
conforma el núcleo del ensayo está compuesta por la selección que incluye: de Canción
del soldado justo “El infranqueable”; de Amanecí de Bala el poema del mismo nombre; Con un pie en el estribo está representado por versos escogidos y
de 70 poemas Stalinistas “Canción de la Noche y el crepúsculo”
EL INFRANQUEABLE
Tú
llegas vacío por entre dientes
y
los panes golpéante debajo
y
sigues muerto de hambre.
Llegas
vacío entre aguaceros
y
la sed corónate su rey
y
sigues hambriento nuevamente.
Y
llegas vacío por entre sastres
y
los trajes dante en las narices
y
sigues al desnudo, caminando.
Tú
llegas vacío por entre labios
y
el amor recíbete a duro celo
y
sigues tan solícito, amando.
Y
llegas vacío entre brazos
y
el amigo en amistad rueda por tierra
y
sigues amistando, cuerdamente.
Llegas
vacío por entre odios
y
el enemigo, ni se diga, te vacil
y
sigues en espera de algún día.
Y
llegas vacío por entre sangres
y
el hermano niégate tres veces
y
sigues ingeniándote animal.
Tú
llegas vacío por entre obreros
y
el desempleo prende la solapa
y
sigues descontento, como nunca.
Llegas
vacío entre lunas
y
el campesino, anochécete el costado
y
sigues afilando la consigna.
Y
llegas vacío entre banderas
y
el pueblo confíate su rostro
y
sigues peleando tu mañana.[1]
“El infranqueable” está
elaborado en torno a nódulos de sentido opuestos colocados en tercetos muy bien
distribuidos en tres partes: desamparo, soledad y falta de solidaridad [2],
con un ritmo sostenido sobre la base del uso reiterado de la conjunción, de
partículas pronominales encíclicas y de
la repetición de dos palabras (llegas y vacío)[3].
El estilo poético tiene por el uso de la repetición el aspecto de canción, la
paradoja es el recurso que sustenta significativamente a la elaboración
poética. “El infranqueable” es una suerte de arte poética, el poeta se sabe incompleto y aunque ante sus
sentidos estén las salidas materiales a sus crisis o a sus conflictos, prefiere
ejercer su oficio de descontento sin reforma, arreglo circunstancial o acomodo.
De ese modo, muestra su desamparo. La protesta evidente se traduce en
inconformidad constante, el poeta sin hambriento, sediento y desnudo no
consigue en su entorno la salvación; sin amor, amistad y hermandad, solitario
se muestra infranqueable pero esperanzado. Sin solidaridad urbana (obreros) y
rural (campesino) el poeta sigue obstinado en su lucha.
Amanecí de bala
amanecí
bien magníficamente bien todo arisco
hoy
no cambio un segundo de mi vida por una bandera roja
mi
vida toda la cambiaría por la cabellera de esa mujer
alta
y rubia cuando vaya a la Facultad de Farmacia se lo diré
seguro
que se lo diré asunto mío amanecer así
esta
mañana cuando abrí las puertas con la primera ráfaga
alborotando
tumbando todo entraron a mis pulmones
los
otros poetas de la pandilla de Lautrèamont
grandes
señores tolerados a duras penas por sus mujeres
al
más frenético le pregunto por su libro vagancia city
cómo
me gusta complicar a mis amigos los vivo nombrando
el
diablo no me llevará a mí solo
ella
antiguamente se llamaba Frida y estaba residenciada en Baviera
en
una casa de grandes rocas levantadas por su amante vikingo
sus
locuras en el mar de los sargazos
hay
sol hasta la madrugada y creo que jamás moriré
sin
embargo deseo que este día me sobreviva
soy
desmesurado o excesivo y no doy consejos a nadie
pero
hoy veo más claro que nunca y quiero que los demás participen
hermoso
día me enalteces desenfrenada alegría
no
tengo comercio con la muerte no le temo
llevo
en la sangre la vida de cada día soy de este mundo
bueno
como un niño implacable como un niño
guardo
una fidelidad de hierro a los sueños de mi infancia
en
este punto soy socrático él y yo
elevamos volantines
restituimos
la edad de oro el “qué habrá al final del arco suspendido”
ahora
mismo se está mudando un río
hoy
una morena de belleza agresiva me dijo pero si estás lindo
entonces
yo le dije acaso no sucede cada dos mil años pierdo el hilo
día
de advenimiento de locos combates de amor a altas temperaturas
desnudos
nos hundimos en las aguas del mismo río
“Amanecí de Bala” por su
parte está elaborado en torno a una propuesta significativa de aprovechar el día, (“hoy no cambio un
segundo de mi vida por una bandera roja/ mi vida toda la cambiaría por la
cabellera de esa mujer alta y rubia”) amando y viendo más claro, y creyéndose
inmortal (“hoy veo más claro que nunca y quiero que los demás participen/
hermoso día me enalteces/ desenfrenada alegría/ no tengo contrato con la muerte
no le temo/ llevo en la sangre la vida de cada día). El poema liga lo
transitorio y lo eterno, lo personal con lo mítico al nombrar a La pandilla. Un
canto a mi mismo resuelto en torno a su amada y a su oficio de vidente, de
amante.
CON UN PIE EN EL ESTRIBO
(selección
de versos)
..........................
Quede
claro hablo de un fuego sin límite
no
del índice ni de la portada del libro de los muertos
..........................
Giro
como un trompo solar
Dudo
pero no desespero
Si
quiero leer un radiante poema lo escribo
un
oscuro también
En
poesía ando solo y suelto prenda
Me
hundo en los relámpagos de las ciencias exactas
............................
En
el futuro la gran confrontación será
entre
fisiología y las matemáticas aquí en la tierra
y
la física teórica y la poesía más allá del infierno
Participaré
vivo y pleno
en
semejante combate en tal estruendo
...........................
Huid
de las Escuelas de Letras cual demonios
Todo
en ellas es inodoro incoloro insípido hasta más no poder
.............................
El
poeta es el detonante
El
poeta es el que ve no el visto
El
poeta cuando se ciega entonces duerme
EL
poeta necesita una cura de vigilia
El
poeta será el clandestino
La selección de Con un pie en el estribo manifiesta la
postura radical de su oficio poético, fija sus linderos, se refleja y se
retrata verbalmente, de modo lúcido arroja sus dardos en cada verso, una
autosuficiencia tremendista y un afán de celebrarse en la poesía, de cantarle
al poema y cantarse. “Definiciones” poéticas, disidencias verbales, un ultimatum
a su entorno.
Finalmente, “Canción de
la noche y el crepúsculo” se muestra como clara propuesta irónica de trastocar
los refranes populares y de incorporar elementos cotidianos ligados a estas
inversiones de sentido en torno a la vida y a la muerte, parodiando las
situaciones alternas para concluir luego con un verso de Quevedo invertido y
divertido. Veamos:
CANCION
DE LA NOCHE Y EL CREPUSCULO
Yo
no le temo a la vida
aunque
la encuentre en la calle
porque
sin permiso del gato
la
vida no vive a nadie
A.
C. Loyola
Entonces
quedamos en que la muerte es una sola
y
lo que se gana apenas alcanza para medio morir
y
dejad que los vivos desentierren a sus vivos
y
estudien en la universidad de la muerte y peligro
de
vida y seguro de muerte y soy fiel a mis vivos y pon
tus
huesos al sol cuando veas dar agua a los de tu vecino
y
aquí muertico y coleando y da lo mismo sentarse frente
a
TV o a la TM y dejen que me les viva y
dejen que me les viva para que ustedes vean
y a los 9 meses y por el método de parto con
bastante dolor
en
la paternidad anti-concepción palacios dio a sombra
un
esquelético de lo más tétrico y son
muchos los ruidos
de
cadenas de felicitación y sus numerosas amistades
han
enviado rosas moradas y mustias y siguen llegando ruidos y flores
y
el progenitor cuerdo de contento obsequia a los presentes grandes
cigarros
de azufre y con estruendo destapa una
helada y espumante
botella
de vitriolo y copas en alto auguran al recién malvenido un venturoso pasado
y
el cáncer no es vital si se le trata a tiempo
y
dése muerte con Coca Cola
y
muerte ¿tú me amas? y te querre hasta la vida
y
se vivió de repente y tan lleno de muerte que se veía
y
obstinado se quitó la muerte de un balazo y adiós fosa cruel
y
vendrá la vida y tendrá tus cuencas y ese relajo in pace
y
el avión se precipitó a cielo y no hay sobremuertos y todo
muere
y se ovilla y vive y el vivero del este es más chévere
que
el vivero general del sur y los rollos del mar vivo
y
el origen de la muerte es hidrópico y otros sostienen lo contrario
y
los sitios de veraneo TO y el paisaje de reposo Venezuela Suya
y
en este recodo del camino sale un vivo a caballo y el sombrero al aire
y
se comió del susto y se las daba de más
muerto que los demás
y
señora un policía vivió a su muchachito cuando salía de la escuela
y
huérfano de padre y madre y he visto vivos cargando basura
y
por ateo no auptosia a los hijos y por eso andan por ahí el santo
día
realengos y sin dios ni diablo que lo guarden y hasta
después
de vivos son útiles y el culto a la impersonalidad y
veremos
y escupiremos sobre la cuna del general desconocido
y
lo vivió de una puñalada y ay rigorito
y
la incomunicabilidad de los muertos y a
li mortacci tua
y
carne serás más carne enamorada
Vigencia
y urgencia de la palabra poética de Víctor Valera Mora.
Una lectura integral de
las obras completas de Valera Mora muestra los postulados de una época de
manera decisiva y transcendente: oficio del poeta, fijar sus versos y sus
circunstancias en favor del reflejo y la comprensión de su entorno mediante una
comunión sustentada en la sensibilidad y en la claridad para asumir su destino
de grabar en versos cada acontecimiento: cada vez que el poeta entrega su
tiempo al oficio de escritura, este se le convierte en tiempo de entrega.
Valera Mora, rescatado
de su prematura muerte por su poesía ha vuelto y urge atender su mensaje
conflictivo, desordenado, irreverente, tremendo e incendiario.[4]
Palabra de conflicto
pero también canto amoroso, canto esperanzado en un porvenir distinto, en un nuevo
universo.
Entre los jóvenes sin
brújula Valera Mora está llamado a ser una luz de verbo y facto, un sendero.
[1]Todos los poemas de Valera Mora aquí citados fueron extraídos del
libro: Obras Completas. Caracas:
Fundarte, 1994.
[2](1)Y llegas vacío por entre labios
(2)y el amor recíbete a duro celo
(3)y sigues tan solícito amando.
[3]y llegas vacío entre
brazos (....) y llegas vacío por
entre odios
y el amor recíbete a duro celo (....) y el
campesino, anochecete el costado
[4]”no puedo vivir sin conflicto/;
todo lo que toco o me toca lo desordeno/; hago lo que me da la gana/;yo sólo
quiero parir escorpiones/; fui un arbolario/un mal incendio/; hay que vivir
agresivamente/; ámame o bórrame del libro de la vida” (Valera Mora, 1994)
Querido José Luis:
ResponderEliminar"Amanecí de bala" siempre estará entre mis recuerdos más felices, tanto por el gusto que le tomé al inefable Chino Valera Mora, como por cierta jugarreta que uno de mis compañeros de pregrado quiso jugarle a otro de ellos. Levantaba su trabajo de alguna de las monográficas finales de nuestro pregrado cuando al llegar a entregar el trabajo me dijiste: "Susana, no es "Amanecí de bala", es "Amanecí de bola", te equivocaste en todo el texto. "¡Jolines!", pensé y salí puertas afuera de la facultad a casa para remediar "mi entuerto". Nuestro compañero afortunadamente iba llegando y allí terminó el asunto. ¿Recuerdas? Abrazos.